VERDADERA MAGIC

Partido súper picante. Un duelo que de arranque ya marcaba la tendencia de una serie por demás ajustada. En su primera intervención, Superman Howard se colgó del aro y lo rompió. Feroz ataque de un super dotado que no se amedrentó ante el estruendo y la bataclana del público local, ni mucho menos ante la omnipresecencia de Lebron King James. El prefacio pagaba el desvelo en la madrugada argenta.

Cleveland es un equipazo. Desde todos los aspectos, cuenta con un potencial y un calbire individual y colectivo sencillamente magnífico. No por nada, ganaron con suficiencia los 8 partidos que habían disputado en la fase de playoffs, despachando a primero a Detroit y luego a los Atlanta Hawks. Todo liderado por el MVP Lebron y secundado primordialmente por los internos -Varejao e Ilgauskas- y la conducción del duo doble W: West y Williams.

Ante la ausencia de un ala-pivote natural, Mike Brown (DT de los Cavaliers y elegido el mejor de la temporada) le planteó de comienzo bolas para el brasilero Varejao en la zona pintada, haciendo esteril la presencia de Howard para barrer en su tablero. Desde esta desconfiguración, los Magics sufrían a la pareja de torres de los blancos, y en especial al brasilero Anderson Varejao, eficiente en el desgaste para que los tirados Delonte West y Mo Williams estuvieran certeros a puro triple.

Orlando se organizaba mediante la dinámica de los cuatro jugadores con naturaleza perimetral de buen dominio y dribbling, y con su caballito de batalla Howard peleando y taladrando sólo con su monstruoso cuerpo atlético en la pintura.

El primer cuarto no era medida. Cleveland fundamentaba su superioridad a base de una defensa muy física, demasiado agresiva y férrea, y mostrando una transición eléctrica con Mo Williams armando la bomba y Lebron detonándola en el aro contrario. En el segundo, el movimiento de ambos bancos se equiparó un poco, luego del gran desgaste hecho al principio. Todo estaba predispuesto para que el local sonriera, incluso, en la última bola y apretado por el reloj, Mo Williams lanzó un ladrillazo desde la mitad del campo y la bola entró limpita. Un 63-46 dilapidario a favor del MVP y compañía, que sumaba 26 y prometía más de las suyas.

Con Howard guardado en el banquillo por faltas, Orlando volvió a las bases de su juego, al pick and roll entre Turkoglu y Lewis, que fueron achicando el score hasta que pasaron al frente por primera vez, recién en el último cuarto. Lebrondependiente, los Cavaliers ya no arrasaban con su internos, y los perimetrales no se acomodaban a la zona impuesta por el rival. Aquí es donde apareció el europeo Hedo Turkoglu, asistiendo, asumiendo el protagonismo en la cocina de la remontada, junto a la puntería de Rashard Lewis, que faltando 14 segundos, reventó de un triplazo la noche para estampar el 107-106 definitivo y así, le quitó el invicto en postemporada a los locales. Lo de James fue superlativo, y sus 49 puntos y 8 asistencias no alcanzaron.

IVÁN ISOLANI (abetsen@gmail.com)

Written by Círculo Sports Radio

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